Desde FOVIDA lamentamos y condenamos el asesinato del líder indígena asháninka Santiago Contoricón Antúnez en Junín, quien ha luchado durante muchos años en defensa de su pueblo y territorio contra las actividades ilegales.
El líder asháninka es un reconocido defensor de derechos humanos y ambientales y formaba parte del Comité de Autodefensa de Puerto Ocopa. En años anteriores también ocupó cargos importantes: en dos oportunidades fue alcalde del distrito de Rio tambo, fue regidor en la provincia de Satipo y consejero regional de Junín. Además, realizó un intenso trabajo en la defensa de su pueblo, frente a la expansión de la coca ilegal y del narcotráfico.
Expresamos nuestras condolencias a sus familiares, comunidad y amigos/as y exigimos las investigaciones necesarias para que su caso, al igual que los de muchos hermanos/as indígenas asesinados por defender sus territorios, no queden impunes.
El caso de Santiago no es aislado. Desde 2011 hasta el julio de 2022 han muerto al menos 29 defensores/as ambientales[1], por defender su tierra de la minería ilegal, tala, narcotráfico y tráfico de tierras. Además, en la última semana de febrero, dos líderes indígenas de la Amazonía peruana fueron asesinados violentamente en sus comunidades. Hasta la fecha, muchos de los casos no han sido atendidos ni se ha generado garantías para sus familias y otros líderes/as indígenas.
Al respecto, unimos nuestra voz a las comunidades indígenas por justicia y reiteramos nuestras exigencias para que se realicen las investigaciones pertinentes de parte del Gobierno y se capture a los responsables. Asimismo, demandamos avanzar en la ratificación y cumplimiento de tratados internacionales, como el acuerdo de Escazú, que garanticen la promoción, protección y acceso a justicia de las y los defensores ambientales.
¡No más muertes de líderes y lideresas indígenas que luchan en defensa de sus pueblos y territorios!
#JusticiaParaLasYLosLíderesIndígenas
[1] De acuerdo a la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH)